las torres que se desploman en silencio. (he visto una)

al darme la vuelta

la torre

había desaparecido

al bajar la mirada

yacía desplomada,

desparramada en el suelo

ni un sólo ruido

en absoluto silencio

se derrumbó

sí, ya sé que la gravedad existe

que por estas realidades ...
todos,

hasta las más altas montañas

deben pactar, jugar con la gravedad

es algo cotidiano y aprendido

algo vital para poder estar erguido,

o simplemente para moverse a ras de suelo

incluso para reptar

es necesario conocer,

 dialogar con la gravedad es necesario.

Si una montaña juega con la gravedad,

 se desliza a vertiginosa lentitud en el tiempo...,

por qué tan hermosa torre,

ha dejado de existir

sin dar un ligero signo de aviso...

podría ser ayudada

podría no caer

pero ha elegido el silencio

 sólo con la ayuda siempre pronta

de la gravedad

ha elegido dejar de ser.

Prefirió convertirse en

trozos,

que ya ni recuerdan a una torre,

debido a  naturalezas esponjosas,

suaves y mullidas,

delicadas,

aromáticas

las delicadas esencias de su naturaleza,

esta torre de ropa

recién secada,

recién lavada

....

segundos antes

había sido un despliegue de colores

ondeantes en el tendal.

Creo que le gusta ser,     dejar de ser,

experimentar en distintas existencias,

con las lentas velocidades de la vida.

Con tanta flexibilidad,

con tanta valentía,

con tanta empatía

y todos sus descubrimientos

será una gran torre

una torre sin fin

que alcanzará abisales alturas

de sabiduría.

 felisabeatrizteijeiroR, 29 marzo, 2012.

abisales alturas

de sabiduría.